22 de enero de 2015

Paganos por el mundo. Enero 2015. Baños de Popea.- Trassierra de Córdoba

Pronto la nueva crónica con fotos de la superruta del mes de Enero...                                                                            





 -Córdoba-Santa María de Trassierra y  Los Baños de Popea...........







Si quieres ver un pequeño trozo de Asturias o Galicia cerca de Córdoba puedes hacerlo... Córdoba dispone de una Sierra espectacular al lado de la ciudad... Para hacer senderismo o rutas de mountain bikes interminables, y todo a la mano.Un lugar precioso para relajarte y descubrir paisajes muy bonitos, llenos de cataratas y naturaleza y del que puedes disfrutar compartiendo un día con tus amigos de bici .... Todo aquí al lado de casa.... No todo iba a ser la Mezquita...

8 de enero de 2015

Paganos por el mundo.- Diciembre 2014 - El Castañar del Tiemblo.-Ávila.



Yastá aquí la supercrónica y fotos de nuestra escapada por El castañar del Tiemblo..... 1700 maravillosos metros de desnivel de subida acumulado, en pleno éxtasis de un bosque repleto de subidas interminables y bajadas de vértigo..........


En  la abulense Reserva Natural del Valle de Iruelas se encuentra un inmenso castañar colmado de majestuosos ejemplares de castaños que se funden con robles, alisedas, avellanos, pinos y acebos.
Una senda que nos sumerge en un soñado bosque de colosos que resulta casi exclusivo en su especie. Parece impensable que a tan solo 2 horitas se encuentre un bosque de fábula, donde se podrían recrear miles de leyendas entre sendas cuajadas de castaños.  En él, los espigados ejemplares se alzan solemnes, casi rozando el cielo de la increíble reserva natural, ubicada en estas antiguas tierras castellanas.





Hay un dicho que reza ¿Dónde va la gente? Donde va Vicente y así es; medio internet últimamente ha visitado el Castañar y nosotros no íbamos a ser menos, es un paraíso por entorno y colorido además de ser una de las rutas favoritas del Pimo Bala ¿se puede pedir algo más? Se trata de uno de los bosques más bellos de castaños en Europa.



 Quedada en churrería Jovi donde nos esperan Pimo Bala, Lord Pagan W y los Canallas cordobeses Alf , Currillo y un nenaza Chus.
La salida la realizamos desde el Restaurante en pleno Parque de Iruelas... bajada de vértigo y fresqui... fresqui, llegamos a un aletargado pueblo de El Tiemblo con un día de seminiebla y temperatura fría non grata que contra mi voluntad me hace salir con bastante ropa, cosa rara en mí que me acaloro en un par de pedaladas. 

Tras un breve paseo por El Tiemblo, nos encaminamos de nuevo hacia la gran rotonda, la última antes de la salida a la carretera, pinchazo del Cordobés, reparamos y nos toca desviarnos a la derecha para encontrar fácilmente la indicación hacia la Senda del Castañar. Cruzamos la urbanización Buenavista y, a la salida, empezamos la ruta.
La subida es suave por una pista ancha y cómoda, de unos siete kilómetros de longitud. 
Durante el ascenso disfrutamos a nuestra derecha de un magnífico bosque de pino resinero, donde pastan las famosas reses de Ávila, y a la izquierda, de la espectacular panorámica de la garganta del Yedra, siempre acompañados por las melodías de las muchas colonias de aves que viven en el pinar. El inicio es de asfalto, pero enseguida, casi a la altura del encantador paraje donde se alza el monumento dedicado a Félix Rodríguez de la Fuente, fotos y más fotos, y empieza la pista de tierra
.El naturalista rodó en este paraje documentales sobre el buitre negro, una impresionante rapaz en vías de extinción,  Ascender por esta pista forestal es una delicia. Al final, después de algo más de siete kilómetros, llegamos al puente de piedra para cruzar el arroyo de la Garganta, por el que entramos en el área recreativa El Regajo, una pradera perfecta para descansar de la subida y reponer fuerzas antes de adentrarnos en la Senda del Castañar.
A la derecha de la zona recreativa de El Regajo, en una ligera bajada cruzamos el pequeño puente de madera que nos adentra en la Senda del Castañar, un espléndido vergel de árboles y agua. Iniciamos la senda en paralelo al arroyo del Castañar, donde en la entrada existe un joven robledal, y, nada más superarlo, empezamos a contemplar abedules, cerezos silvestres y avellanos.
El camino asciende ligeramente y, tras unos metros, comenzamos a ver el majestuoso bosque de esbeltos y longevos castaños, que se alzan infinitos hacia el cielo. Mientras bordeamos el monte con desniveles suaves, llegamos a la fuente de los Cazueleros, donde encontramos una bifurcación y tomamos el camino de la derecha.
Descendemos por una suave bajada, para cruzar el pequeño puente de madera sobre el arroyo del Castañar. A partir de aquí continuamos, ahora en subida, entre magníficos ejemplares, pisando una lujosa alfombra de hojas y amenizados por el increíble sonido del silencio.
Al final de la pendiente llegamos a una explanada donde el bosque se abre y encontramos a la derecha el acogedor refugio de Majalavilla. El albergue, que casi siempre tiene leña en el exterior para encender su chimenea, está ubicado en un enclave privilegiado, sito en un conveniente cruce de caminos. Aquí muchas fotos en su interior lleno de colorido y graffittis. Dejamos Majalavilla a nuestra derecha y descendemos por el camino hasta encontrar un pino resinero, provocador por su considerable tamaño, bien alimentado por el nutritivo sustrato de la zona, donde los pinos pueden llegar a alcanzar más de 40 metros de altura.
El abuelo del castañar
Un poco más abajo, a menos de cien metros, llegamos al Abuelo, el coloso de la senda, el señor del bosque, el soberano de savia lenta que reina en esta arboleda. El Abuelo es un castaño monumental de más de 500 años, con 19 metros de altura y más de trece de diámetro. A pesar de estar totalmente hueco, siempre rebrota en los meses de primavera. A su alrededor, a modo de simbólica protección, lo guarda una valla de madera, y un original cartel de la concejalía de Medio Ambiente anima a los visitantes a que lo respeten.
Cuentan el escrito que en su interior se podían resguardar grandes rebaños de cabras. Su tacto, su madera, su ubicación y su inmensidad seducen, sin lugar a dudas, a cualquier biciclista.
Después de disfrutar del longevo coloso,tras numerosas fotos, reanudamos el camino. Entre la arboleda, divisamos a la derecha la garganta de la Yedra, mientras nos adentramos en una de las zonas más solitarias del bosque mágico. Estamos en un área deliciosa por su frondosidad y por el tintineo del agua del arroyo. Su sonido y sus continuos saltos de agua embelesan al biker y casi invitan a bajar al margen del río, que tiene un agua tan limpia que lo convierte en un paraíso para truchas y nutrias. Aquí los centenarios castaños se mezclan con los robles y forman un increíble contraste de colores y texturas... ahora nos disponemos a acercarnos al pozo Nieve.............
SEGUIRÁ...... no encuentro las dichosas fotos del abuelo castaño, así que mañana sigo buscando , hoy "yastoy" hasta los güevos de escribir.......